“Todos debemos trabajar en conjunto por el macroproyecto del Canal del Dique”: Édgar Ortiz Pabón
El macroproyecto del Canal del Dique será ejemplo para la región y para el mundo de cómo desarrollar iniciativas que permitan la recuperación ambiental y el mejoramiento de la calidad de vida de las personas. Por eso es importante que no sólo el gobierno central sino los gobiernos locales, regionales, y el sector privado contribuyan a generar alternativas para sacar adelante este proyecto.
“Todos debemos trabajar en conjunto por el macroproyecto del Canal del Dique”: Édgar Ortiz Pabón
Noviembre 26 de 2018. El macroproyecto del Canal del Dique será ejemplo para la región y para el mundo de cómo desarrollar iniciativas que permitan la recuperación ambiental y el mejoramiento de la calidad de vida de las personas. Por eso es importante que no sólo el gobierno central sino los gobiernos locales, regionales, y el sector privado contribuyan a generar alternativas para sacar adelante este proyecto.
Así lo aseguró el gerente del Fondo Adaptación, Édgar Ortiz Pabón, al participar en el seminario “Cartagena: una visión comercial”, que forma parte de la agenda que tiene prevista la misión comercial de los Países Bajos que visita Colombia, encabezada por el Primer Ministro, Mark Rutte.
Durante la reunión el gerente del Fondo mostró las ventajas que traerá para el país y para el continente el desarrollo de este megaproyecto, considerado el proyecto integral más ambicioso de la región.
“Regular los caudales en las ciénagas permitirá planear las actividades productivas de la eco región para tener mayor eficiencia e integrarse al modelo económico que se potencia con la estabilización de la navegación fluvial, lo que trae consigo beneficios directos a 1.5 millones de personas de los 3 departamentos que la conforman (Bolívar, Atlántico y Sucre)”, explicó Ortiz Pabón.
El directivo explicó que el macroproyecto del canal del Dique se diseñó en dos fases: la primera, la protección de los cascos urbanos, que ya está a punto de finalizar, y permite prevenir inundaciones y manejar las condiciones críticas como las del fenómeno de La Niña 2010 – 2011.
La segunda, son obras que permitan la ejecución del plan de manejo hidrosedimentológico del sistema Canal del Dique, estableciendo interconexiones entre las ciénagas y el Canal el Dique, conexiones ciénaga- ciénaga y con los distintos canales naturales del sistema. “
El costo de la segunda fase, que incluye el desarrollo de dos esclusas y una compuerta, tipo Canal de Panamá, se ha estimado en aproximadamente $2,8 billones sobre los cuales se debe empezar a trabajar en una alternativa financiera donde además de la Nación, la región, el sector privado, las comunidades beneficiadas deben entrar a generar alternativas”, argumentó el gerente del Fondo.
Actualmente están listos los estudios y diseños a detalle y se estructura financieramente la segunda fase del proyecto, para lograr el cierre financiero que permitirá su contratación.
“Una vez tengamos resuelto el tema de la financiación estaremos listos para iniciar el proceso de contratación y construcción”, dijo Ortiz Pabón.
El desarrollo de este proyecto es de gran importancia porque además la recuperación del ecosistema se asegura el suministro de agua dulce a los pobladores vecinos y a Cartagena, porque controlaría el ingreso de la cuña salina al sitio de bocatoma de esta ciudad.
“Igualmente, se detendrá el proceso de sedimentación del fondo de la Bahía de Cartagena, que a este paso podría cerrarse para la navegación en unos 8 años, como lo han advertido importantes académicos”, manifestó el directivo.
La importancia también está en lo comercial. Hoy por el canal se transporta más del 85% de la carga fluvial del país, cerca de 2 millones de toneladas al año, y con el megaproyecto se asegura la navegación los 365 días al año; y se convertirá en una vía fundamental para la economía de Colombia que además incentivará el desarrollo portuario y el comercio internacional.
De hecho, el sistema de esclusas permitirá el paso de un convoy con una capacidad de 6 barcazas que podrán transportar 7.200 toneladas, lo que equivale a 206 tractomulas.
