En Gramalote, el 22 de septiembre de 2023, el Fondo Adaptación y el Gobierno del Cambio hicieron historia al impulsar la reactivación económica de este municipio nortesantandereano que alguna vez sufrió una devastadora tragedia en 2010. En un día soleado, los gramaloteros y las gramaloteras vieron cómo sus sueños renacían gracias al esfuerzo conjunto de la comunidad y el apoyo del Estado a través del Fondo Adaptación.
El día era particularmente hermoso y, sobre todo, estuvo lleno sonrisas porque el equipo del Fondo Adaptación del Gobierno de la Vida había logrado dar continuidad al proyecto de reactivación económica, para apoyar a emprendedores del municipio, quienes recibieron lotes comerciales avaluados en más de $ 2.200 millones para impulsar el desarrollo económico y la economía popular de Gramalote.
Una de esas emprendedoras que recibieron el anhelado apoyo, y a quienes el Gobierno del Cambio les está cumpliendo es María Consuelo Mendoza. Esta mujer es madre de tres hijos y recordó cómo llegó a Gramalote en 2010 para asistir a la graduación de su hijo. Pero la tragedia que destruyó Gramalote el 16 de diciembre de 2010, cambió su vida para siempre. Sin embargo, a pesar de perderlo todo, María Consuelo no se rindió. Alquiló una casa en Prado Norte y comenzó a vender comida para mantener a su familia.
Después de años de lucha, María Consuelo se convirtió en una de las beneficiarias del proyecto de reactivación económica del Fondo de Adaptación. Este proyecto le permitió expandir su negocio de comida y, finalmente, abrir su propio restaurante. Con lágrimas en los ojos y un corazón lleno de gratitud, María Consuelo compartió su historia y destacó la importancia de seguir luchando por los sueños, incluso en medio de la adversidad.
Otra de las historias de resiliencia de Gramalote es la de María de los Ángeles Escalante, quien decidió postularse al proyecto de reactivación económica con el objetivo de expandir su negocio de papelería, "Mis Angelitos". “Esta es una oportunidad para mi crecimiento personal y familiar. Aunque tuvimos altas y bajas durante tantos años, siempre hemos mantenido la fe y determinación y seguimos adelante”, contó la mujer con una sonrisa esperanzadora.
Esta madre de tres hijos también agradeció al Fondo de Adaptación por brindarles apoyo y oportunidades para fortalecer sus negocios. María de los Ángeles ve su papelería como una forma de contribuir a la reactivación económica de Gramalote. “Estoy comprometida con mis sueños y seguiré trabajando duro para lograr mis metas”, aseguró María de los Ángeles.
Otra mujer admirable del municipio, que ahora tiene un nuevo impulso gracias al apoyo del Fondo Adaptación es Cecilia Ayala Correa, quien hizo sus sueños realidad con su hogar propio. Cecilia Ayala Correa se emocionó hasta las lágrimas al recibir las llaves de su nueva casa. Mencionó que, aunque experimentó nostalgia al pensar en su madre fallecida, también sintió alegría al finalmente obtener su hogar propio después de años de espera.
Aunque Cecilia pensó que nunca llegaría este día, hoy es una realidad gracias al trabajo incansable del Gobierno de la Vida y a la perseverancia del Fondo de Adaptación, que finalmente le permitieron cumplir su sueño.
Además de la vivienda, Cecilia destacó la importancia de otros proyectos, como la reactivación económica, que benefició a sus vecinas y que han transformado Gramalote en una comunidad en crecimiento. “Tenemos que aprovechar los recursos disponibles y de seguir adelante con determinación”, dijo.
Un proyecto que transforma vidas
Las historias de María Consuelo, María de los Ángeles y Cecilia representan el espíritu inquebrantable de los gramaloteros y el impacto positivo del proyecto del Fondo de Adaptación en la comunidad. La reactivación económica, la construcción de viviendas y otras iniciativas han dado nueva vida a Gramalote después de la devastación causada por la tragedia de 2010. Los beneficiarios expresaron su profunda gratitud hacia el Fondo de Adaptación por su apoyo continuo y alentaron a otros a nunca perder la esperanza ni dejar de luchar por sus sueños.
Con una comunidad resiliente y un proyecto que ha demostrado su valía, Gramalote se erige como un ejemplo de superación y determinación. La reactivación económica y la reconstrucción de la comunidad son un testimonio de lo que es posible cuando se trabaja juntos en la búsqueda de un futuro mejor.
El compromiso del Fondo de Adaptación, junto con la fuerza de los gramaloteros, ha dado como resultado un renacimiento de esta comunidad que toca el cielo, y demuestra que los sueños se pueden hacer realidad, incluso en las circunstancias más desafiantes.
