Pensar a fondo la adaptación climática
- Editoriales 2024
- Visitas: 38
Articular visión, pensamiento y acción para la adaptación climática

Con datos registrados durante este año, tan alarmantes como el de India en donde se presentaron las temperaturas récord de 52,3 grados Celsius el 27 en mayo; o las más de 500 víctimas por una ola de calor nunca antes presentada en la peregrinación de la Meca, hablar de variabilidad y adaptación climática ya es una obligación y supone diversos aspectos por considerar. En la medida que los efectos del cambio climático se vuelven irreversibles, la complejidad para la toma de decisiones, que permita controlar dichos efectos y mitigar sus impactos, aumenta la necesidad de incorporar actores, coordinar y definir las acciones más pertinentes, en donde es esencial leer y comprender las interacciones entre la naturaleza y las actividades humanas.
En este documento, se profundizará sobre el papel del Fondo Adaptación (FA) en el marco de una política de consolidación de acciones integrales, que permitan sobrevivir bajo las nuevas condiciones que hemos creado en las últimas décadas.
A fondo con la adaptación y en paz con la naturaleza

La atención a la emergencia se entiende como una respuesta inmediata, eficaz y ágil al fenómeno sucedido. Es la etapa humanitaria que busca atender los efectos generados por el fenómeno, atendiendo como foco central la protección de la vida humana y prevención de nuevas víctimas. Las estrategias de adaptación, por su parte, son las que evalúan y definen cómo convivirán la naturaleza y los seres humanos, en las siguientes décadas; son las acciones que abordan la solución de fondo. De otro lado, las estrategias de mitigación persiguen reducir las emisiones netas a la atmósfera de gases de efecto invernadero, pues son resultado del cambio climático antropogénico y requiere compromisos y acciones globales inmediatas y sostenibles.
En este sentido, “el Fondo Adaptación atiende de manera integral los factores estructurales de reconstrucción y reparación física, los factores sociales, económicos, humanos y ambientales, que permitan prevenir futuros riesgos climáticos”, expone Gerardo Trejos, Subgerente (e) de Estructuración del Fondo Adaptación. Es pertinente entender que, a pesar de requerir estrategias diferentes, la atención, mitigación y adaptación, tienen acciones complementarias.
Frente a ese gran desafío, el Fondo Adaptación asume un compromiso de paz con la naturaleza y respeto por los saberes autóctonos, las costumbres y los modos de vida de la gente, para cumplir su misión institucional de llegar al fondo de las causas, entender el clima actual y las consecuencias de las variabilidades climáticas, para ofrecer soluciones de adaptación en Colombia. En ese sentido, se plantea como el centro de pensamiento, planificación y acción participativa, que ejecuta el plan de adaptación de en el país, así como las acciones de ordenamiento territorial alrededor del agua.
El Fondo Adaptación hoy; Sentir, pensar y actuar diferente

Creado como un fondo de inversión en respuesta a la emergencia del fenómeno de La Niña del 2010 – 2011, el Fondo Adaptación recibió, el pasado 20 de marzo, durante el la realización del evento del Gobierno con el Pueblo en San Marcos, Sucre, la directriz presidencial de pensar, planear y ejecutar soluciones integrales y sostenibles de adaptación al cambio climático en Colombia, con estrategias basadas en la naturaleza, que permitan ordenar el territorio alrededor del agua, como principal valor para la vida.
La entidad por ley (Artículo 46 de la Ley 1955), pertenece al Sistema Nacional de Riesgos y Desastres, que tiene el fin común de atender las emergencias climáticas, reducir las vulnerabilidades, proteger los ecosistemas, fortalecer la adaptación e incrementar la resiliencia frente a los fenómenos del Niño y La Niña, fenómenos que marcan las dinámicas cambiantes del clima tropical, en los sistemas humanos y naturales.
En cumplimiento con el Plan Nacional de Desarrollo Colombia Potencia De La Vida, El Fondo Adaptación hoy tiene la responsabilidad de liderar el pensamiento y ordenar el territorio alrededor del agua, en las ecorregiones definidas como prioritarias y presentar grandes proyectos, como el macroproyecto integral de La Mojana, para el cual se logró, durante la actual administración, la asignación de recursos por un valor de 1,1 billones millones de pesos. Este macroproyecto tiene como fin principal la recuperación del sistema de regulación hídrico regional de La Mojana y la recuperación de los servicios ecosistémicos que favorecen a la población, la biodiversidad y el ordenamiento del territorio.
Por su parte, los departamentos de Sucre, Bolívar y Córdoba se sumaron a la apuesta presupuestal del Gobierno nacional y adicionaron 520 mil millones de pesos de regalías para el Plan de Acción que requiere la ecorregión. En estos momentos el Fondo Adaptación trabaja en acuerdos o alianzas con entidades como el Ministerio de las Culturas, Artes y Saberes, el Ministerio de Medio Ambiente, el Ministerio de Educación, en un modelo de pensamiento, participación, acción, que se plantea replicar en otras ecorregiones como el Pacífico, la Guajira y la Ciénaga de la Virgen, macroproyectos que están en etapa de evaluación para darles viabilidad presupuestal.
Con esa visión amplia y responsable asumió Helga María Rivas, la gerencia del Fondo Adaptación, acompañada por un equipo humano transdisciplinar, quien será responsable de finalizar y entregar los proyectos iniciados durante el fenómeno de La Niña 2010 – 2011, así como de emprender los nuevos proyectos de inversión que le permitirán cumplir la nueva misión estratégica y de alcance nacional, para contribuir al cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo, diseñando una estrategia integral de adaptación al cambio climático en Colombia.

Para avanzar en esa estrategia se debe comprender que en Colombia, “el cambio climático tiene una afectación, no predilectica, que afecta a los más desfavorecidos, a los más pobres, a los que han tenido menos riquezas, a los que han tenido menos oportunidades económicas y educativas, a los que tienen menos capacidades adaptativas y adquisitivas. El fenómeno climático afecta a todos, pero ¿cómo se responde a eso? Lamentablemente ha tenido que ver con las capacidades socioeconómicas, es decir; los que pueden, responden con resiliencia mucho más rápido. Por eso nosotros lo que tenemos es que democratizar esas capacidades adaptativas desde el papel del Estado, con las capacidades y los recursos que tiene el Estado, y eso es lo que debe hacer hoy el Fondo de Adaptación”, afirma Andrés Charry, Subgerente de Regiones FA.
Algunos ejes de acción y alcances de la intervención del Fondo Adaptación
En cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo, el Fondo Adaptación estructuró su Plan Institucional a partir de cinco ejes: 1. Enfoque territorial y ecosistémico; 2. Seguridad humana, justicia social, ambiental y equidad de género; 3.Procesos integrales, incluyentes y participativos; 4. Acceso a la información y transparencia; 5). Ordenamiento territorial alrededor del agua.
El fin último es ordenar el territorio alrededor del agua y poner a la gente, la naturaleza y su biodiversidad como ejes del pensamiento-acción participativa, para lo cual se trabaja en los siguientes frentes:
- Métodos e instrumentos para la evaluación y diagnóstico.
- Convergencia con la academia.
- Diálogos regionales, nacionales e internacionales.
- Acción territorial para la adaptación socioeconómica, planificación y prácticas de adaptación, investigación y gestión de conocimiento.
- Tecnologías para la adaptación, diversificación económica, convergencia regional.
- Articulación con tomadores de decisión a nivel nacional, regional y territorial.
“El presidente lo ha dicho muchas veces y se lo dijo a la Gerente cuando puso en sus manos la misión del Fondo Adaptación: es que ustedes se deben encargar de construir el discurso de la adaptación al cambio climático, la narrativa y el conocimiento. Es una entidad de pensamiento, conocimiento y acción participativa”, asegura Andrés Charry, con la misma pasión que lo sienten la mayoría de las y los profesionales que conforman el gran equipo humano del Fondo Adaptación.
De manera complementaria y transversal, la gerente del Fondo, Helga María Rivas, presenta su visión de ética y estética como dos grandes manos, una que entrega los proyectos terminados y mejorados del fenómeno de La Niña 2010-2011, y la otra, que presenta las nuevas soluciones en proceso de diseño y contratación, con el enfoque de ordenamiento territorial alrededor del agua, de protección a la biodiversidad, con soluciones de hábitat sostenible con enfoque de género, viviendas y sistemas ecosistémicos adaptados a los desafíos climáticos que se vislumbran en este nuevo clima, con un fenómeno de La Niña que se avecina cada vez más fuerte e impredecible.
Desde su posesión como gerente del Fondo Adaptación, Helga María Rivas emprendió el compromiso de finalización de los proyectos y macroproyectos en proceso de ejecución y entrega: La Mojana, Gramalote, Canal del Dique, Jarillón de Cali, en los cuales la visión de la Gerencia es agregar valor y garantizar la calidad, en la medida de lo posible, en el seguimiento a los contratistas, actualizar y mejorar las soluciones que se puedan dentro de los parámetros y presupuestos ya asignados a esos proyectos y macroproyectos.

En el macroproyecto de Gramalote, que comprende la reubicación de cerca de mil hogares que habitaban el casco urbano de este municipio de Norte de Santander, que desapareció por una remoción en masa, a un sitio seguro, la solución fue la reubicación del municipio que incluye la reconstrucción del núcleo institucional, comercial y social: Centro Administrativo, plaza de mercado, colegio y hospital entre otros servicios. Además de la construcción de las viviendas, el proyecto contempla medidas para la reactivación económica, el restablecimiento de las relaciones comunitarias y el fortalecimiento institucional del municipio.

El proyecto Jarillón de Cali es un macroproyecto del Fondo Adaptación en convenio con la Alcaldía de Cali, que tiene por objeto reducir el riesgo por inundación asociado al río Cauca y al sistema de drenaje oriental, protegiendo la vida y bienes de 900.000 habitantes del oriente de la capital del Valle del Cauca. Así mismo, este proyecto reforzará la infraestructura vital de servicios públicos ubicada en el oriente de la ciudad, que en caso de resultar afectada por el desbordamiento del río Cauca y/o la ruptura del Jarillón, impactaría a la mayoría de la población de Cali (75%), la cual podría quedar sin servicio de agua potable.

Para el Macroproyecto Canal del Dique, la solución consiste en la definición y ejecución de un Plan de Manejo Hidrosedimentológico para la restauración de los ecosistemas degradados del Canal del Dique incluye la estructuración y gestión, estudios y diseños de obras para disminuir el riesgo de inundación en 12 centros poblados, 2 tramos viales y 1 punto crítico, para el corto plazo, y 7 obras de esclusas y compuertas para mediano y largo plazo.
El sector "Hábitat", el Subgerente de Gestión del Riesgo, Julio Báez, explica cómo se han atendido las soluciones habitacionales, donde el Fondo Adaptación ha estado integrando tres nuevos conceptos basados en su experiencia de la última década. “En primer lugar, se busca redefinir la contribución solidaria de cada familia, aprovechando no solo los recursos económicos, sino también el valioso contingente de recursos humanos populares que influyen directamente en los costos de las inversiones habitacionales para el beneficio de toda la sociedad. En segundo lugar, se enfoca en colaborar con organizaciones sin ánimo de lucro y comunitarias regionales como plataformas para la innovación en autoconstrucción híbrida”.
En este sentido agregó que esto implica fomentar la participación social positiva, coordinar esfuerzos para mejorar los entornos y realizar un seguimiento efectivo de los resultados. “En tercer lugar, se prioriza la sostenibilidad y la permanencia de las inversiones, haciendo hincapié en fortalecer las capacidades sociales, la participación y la autogestión. Todo esto se logra a un costo razonable, facilitando así entornos habitacionales más adecuados y comunidades más capacitadas”.
La Mojana, referente del ordenamiento territorial alrededor del agua
El Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026. Colombia Potencia De La Vida, en su eje de Ordenamiento territorial en torno al agua, supone diseñar soluciones basadas en la naturaleza y con prioridad en la biodiversidad propia de cada ecorregión, su cultura y los modos de vida de la gente, para reducir la vulnerabilidad y aumentar la resiliencia de las poblaciones, así como la sostenibilidad de la infraestructura vial, del hábitat y los sistemas productivos, ante los efectos de los fenómenos climáticos, que permitan conservar y usar de forma sustentable los ecosistemas y mantener los beneficios ambientales que nos proveen.
“Para la ecorregión de La Mojana, el Fondo Adaptación ha propuesto un esquema Convergencia Regional e Institucional para la implementación de medidas estructurales y no estructurales que planteen e implementen alternativas sostenibles para el ordenamiento de este territorio. El gran éxito de esta metodología ha sido poder garantizar recursos superiores a los 2,2 billones de pesos en 3 grandes proyectos donde confluyen recursos del Presupuesto General de la Nación (PNG), El Fondo para la Vida y el Sistema General de Regalías del OCAD Caribe”, agrega Paola Miranda, Subgerente de Proyectos del Fondo Adaptación.


Así mismo, en éste mismo territorio, “Proyectamos la creación del Instituto Mojanero de Pensamiento (IMAN), un instituto dinámico que explore el concepto de universidad y pensamiento en torno al agua, integrando el conocimiento local y los modelos desarrollados desde Bogotá. El plan de trabajo que desarrollemos en conjunto con el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Ambiente, la Unidad de Gestión del Riesgo y el Ideam, garantizará presencia y compromiso del Estado en el territorio.”, destaca la arquitecta Helga María Rivas, gerente del Fondo Adaptación.
El desastre climático que vemos a diario no puede considerarse un fenómeno natural, sino la consecuencia de acciones humanas, del crecimiento descontrolado, de los impactos ambientales y la crisis climática, producto de la acción antrópica, que genera un escenario de riesgo que parece inmanejable en territorios tan dinámicos y vulnerables como la Mojana. Esto implica repensarse las soluciones que hasta hoy se han propuesto en una visión de corto plazo como tratar de controlar los ríos o darle la espalda al agua.
La visión que hoy se plantea es construir nuevos acuerdos de ocupación del territorio, para su uso y aprovechamiento sostenible y pactar una gestión integral entre el Estado, los privados y las comunidades, pues todas las alteraciones que se hagan en cualquier punto de La Mojana afectan sus terrenos.
La Mojana no sólo enfrenta inundaciones, (fenómeno de La Niña) sino también épocas de sequía (fenómeno del Niño) y otros factores de difícil gestión como la contaminación de sus aguas con metales pesados, lo cual podría ser considerado más destructivo que las mismas inundaciones. En ese sentido los nuevos acuerdos deben llevarnos a pensar en el otro y darle viabilidad financiera a ese nuevo modelo de ocupación y uso del territorio, para que sea territorio donde la justicia social, ambiental y el desarrollo regule el uso, las intenciones y las necesidades de todos y todas.

El análisis que tiene el Fondo Adaptación sobre la ecorregión de La Mojana “hay que ponerlo en discusión con la población”… “y desencadenarlo porque ya viene el otro invierno. Caregato no es el problema, es por donde el rio esta vez rompió, pero el río mañana se puede romper por otro lado. No sabemos, luego esto es más complejo de lo que sabemos y por eso hubo un gran debate con la población. Por eso, lo que necesitamos es otra visión que es la gestión del agua de La Mojana, donde podamos convivir con el agua, no como enemigos, sino como amigos”.2
La intervención integral del Fondo Adaptación, como la entidad a cargo de proponer y ejecutar acciones climáticas integrales y sostenibles, se contempla como un centro de pensamiento-acción, con la facultad de sentipensar, que el maestro Fals Borda descubrió en su trabajo en regiones como La Mojana, ecorregión que es referente nacional de ordenamiento territorial alrededor del agua y macroproyecto principal y prioritario del Fondo Adaptación.
2 Presidente Gustavo Petro, gobierno con el pueblo 20 de marzo, en La Mojana
Oficina de Comunicaciones Fondo Adaptación
Contacto:
Henny Porras (Periodista)
Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Necesita activar JavaScript para visualizarla.